MANIFIESTO
Hidropoéticas Ambientales nace desde la convicción de que el agua es un ser vivo y un sujeto de derecho con el que cohabitamos. Cada cuerpo de agua sostiene memorias que atraviesan territorios y personas. Acercarnos a ellas es recuperar el vínculo que permite que la vida siga fluyendo.
Creemos en el arte como una herramienta para afinar la percepción y abrir caminos de relación con lo que hemos dejado de mirar. El arte nos ayuda a imaginar otras formas de habitar y a cuidar lo común con sensibilidad y presencia.
Nos movemos entre saberes locales, metodologías científicas y experiencias que nacen de caminar los territorios. Ninguna mirada es suficiente por sí sola. La diversidad generacional y disciplinar amplía la comprensión y fortalece la acción colectiva.
El Buen Vivir orienta nuestro paso. Nos recuerda que la vida solo prospera cuando existe equilibrio entre seres humanos, ecosistemas y demás formas de vida. Cuidar las aguas como sujetos de derecho es parte de esa responsabilidad compartida.
Nuestras residencias artísticas funcionan como espacios vivos de investigación, creación y encuentro. Son territorios temporales donde artistas, comunidades y cuerpos de agua dialogan, experimentan y producen nuevas formas de entender y convivir.
Poder reconocer la complejidad del territorio: capas que se cruzan, se influyen y se sostienen entre sí. Crear desde esa complejidad abre posibilidades para vínculos más cuidadosos.
Las aguas también se relacionan entre ellas. Se buscan, se responden, mantienen redes que sostienen la vida del planeta y del universo. Al revincularnos con ellas recordamos que formamos parte de ese entramado y que nuestra continuidad depende de su bienestar.
Hidropoéticas Ambientales es un repositorio vivo de procesos, obras y experiencias que emergen de la relación entre arte, territorio y agua. Un espacio para imaginar, cuidar y crear junto a las aguas.